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- Empezar un texto
haciendo referencia a Buenos Aires
tiene un toque efectista.
Al menos a mí me provoca -

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Corren los finales de enero en Buenos Aires. Floreciente verano.
Serán estas otras vacaciones perdidas de dunas, salitre y campo?

Cambiar el subte por aires marinos... Un par de días para relajar tensiones y reverdecer las ganas amortajadas por el tedio.

Siempre es lo mismo. El aire, el mismo. Los mismos pasos enmoheciendo articulaciones y bronquios. Ved como chorrean alquitrán sus fuelles. Y no fuma.

Laura descalza en la humedad del pasto.
Sentirse viva.

El sol de la mañana rebela la piel que el viento aplaca.
Suspira.

Caer y levantarse.
Y volver a caer. Y otra vez, levantarse.

Altiva
Brillo de diamantes.

Como una brizna hercúlea.
Como los embates de un brote en su empeño por nacer.
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